El plan de comunicación estratégica y mercadeo integrado es el responsable de crear y mantener el valor de la marca de una empresa. Esta es una herramienta que permite concretar o materializar la planificación estratégica corporativa y la planificación estratégica del marketing. No se debe confundir el plan de comunicación estratégica y mercadeo integrado con la planificación estratégica de marketing pero se necesita de esta para poderse ejecutar. No siempre se le atribuye la importancia real que tiene, esta es una realidad a la que llega gran parte de las empresas cuando ya han gastado más recursos y tiempo de lo que pudieron ahorrarse.
Por eso, hoy quiero que tomes conciencia de la importancia que tiene aplicar un plan de comunicación estratégica y mercadeo integrado en tu empresa antes de desarrollar cualquier estrategia aislada.
Importancia de desarrollar un plan de comunicación y mercadeo integrado en tu negocio:
1. Te alineas con el nuevo foco de venta
El foco de venta ha cambiado. Hasta hace poco las empresas se enfocaban en el producto a la hora de vender, ahora es necesario enfocarse en las personas y sus emociones. Esto es posible desarrollando una marca, es la forma más tangible que tiene una empresa para estar presente en las conversaciones de los consumidores.
2. Permite tener una identidad de marca consistente
Pero no se trata de tener una marca aislada de la empresa, esta necesita ser coherente, ya que, el consumidor tiene un papel más activo en las decisiones de compra y también actúa como comunicador de la marca. Si la marca no es consistente con la misión y visión de la empresa el mismo consumidor lo notará y se encargará de decírselo a los otros por cualquier medio de comunicación, desprestigiando a la empresa. Por el contrario, cuando la identidad de la marca es consistente ayuda a formar, crear, y guiar al consumidor, logrando una relación armoniosa con el público objetivo.
3. Es menos vulnerable a los designios del mercado
Ya no es suficiente la elaboración de tácticas o pequeños pasos aislados y masivos para vender un producto que solo resuelven problemas puntuales y a corto plazo que responden en realidad a estrategias reactivas. Con una planificación estratégica de comunicación se desarrollan estrategias proactivas a largo plazo (6 meses a un año) que permitan la comunicación coherente de la marca, de esta manera se está más preparado para los cambios del mercado.
4. Se ahorran recursos
En consecuencia, se optimizan los recursos que se necesitarán de acuerdo al plan de acción. De esta manera se prevé el presupuesto y no se hacen gastos por el camino no presupuestados, típico de estrategias reactivas.
5. Afina la ventaja competitiva
En la planificación estratégica general es necesario definir la ventaja competitiva de la empresa; pero es en la planificación estratégica de marketing junto con la de comunicación donde se establecen las verdaderas estrategias para hacer este objetivo tangible.
6. Permite una mejor segmentación del mercado
Cuando una empresa no elabora desde el principio una planificación estratégica de mercadeo, estas desarrollan productos sin conocer bien a su público o audiencia, ya que no los definen. Esto hace que por un lado, se corra el riesgo de desarrollar productos que el público no necesita; y por el otro, no se tiene en cuenta la necesidad real del consumidor pudiendo existir cambios en el mercado que tomarán a la empresa por sorpresa. Cuando Ford desarrolló los primeros vehículos, las personas necesitaban trasladarse más rápido, algunos pensaron en estrategias para hacer que un caballo corriera más veloz. Henry Ford pensó en un nuevo vehículo.
7. Se evita la procrastinación
Postergar actividades que son relevantes para la empresa atrasa su desarrollo. Con una planificación estratégica de mercadeo es posible jerarquizar las actividades de acuerdo a su relevancia para la empresa. Además, se establecen fechas precisas para la evaluación de resultados con indicadores adecuados que podrían ser ignorados por la empresa de no existir un plan. De esta manera, se logra concretar y evaluar los resultados de campañas de publicidad, relaciones públicas, comunicación online, patrocinio, branded content, entre otros.
8. Se incorpora la mejora continua
Y finalmente se logra la mejora continua, es decir evaluar aquello que ha sido positivo y descartar lo negativo para avanzar en estrategias más afines con la realidad. Al final, todo lo aprendido se suma a la ventaja competitiva de la empresa gracias a la sistematización de la experiencia que se hace con una planificación estratégica de comunicación.
Referencia Tur, V. y Monserrat, J. (2015). El plan estratégico de comunicación. Estructura y funciones. Razón y palabra (88). México.